Estamos en verano, época en la que resulta más fácil realizar actividades al aire libre y que debemos aprovechar para mejorar la calidad del tiempo que pasamos con nuestros hijos. Es en las vacaciones familiares cuando se deben reforzar los lazos entre padres e hijos, ya que se dispone de un tiempo que durante el resto del año no se tiene.
Las vacaciones son un momento ideal para asentar los valores que deseamos transmitir a los niños con nuestro ejemplo, es importante que nos vean hacer lo que decimos y que los felicitemos cuando ellos también lo hagan. Ser amables con los demás, recoger tanto en casa como en la playa o el campo los desperdicios que hayamos generado, ayudar en las tareas familiares o compartir son algunas de las conductas positivas que debemos reforzar en nuestros hijos.
Es importante no relajar en exceso las pautas establecidas durante el año y seguir siendo firmes a la hora de corregir comportamientos inadecuados, pero también lo es realizar actividades divertidas que fomenten la unión entre los miembros de la familia, como pueden ser:
- Sorprenderles con un desayuno divertido, hacer tortitas con caras alegres, elaborar alguna receta con ellos…
- Pasar una tarde lluviosa con algún juego de mesa para toda la familia, de estrategia o colaborativos: Catán, Las Montañas de la locura, Monopoly…
- Hacer un plan de película con valores para luego comentarla entre todos: “Wonder”, “Del Revés”, el cortometraje “Cuerdas”, “Epic: el mundo secreto”…
- Ir juntos a una librería y escoger cada uno un libro, fomentando la lectura desde que son pequeños.
- Hacer una excursión en familia, a pie o en bicicleta, es una idea estupenda para pasar tiempo juntos y una actividad que les gustará ya que es más complicada de realizar durante el curso y no estarán acostumbrados a ella.
Nuestra psicóloga Isabel Menéndez nos da también algunos consejos para pasar este tiempo de descanso con los niños en este enlace.