Llamamos Enuresis o incontinencia urinaria a la emisión repetida de orina de manera involuntaria durante el día o en la cama por la noche. Para que sea considerado un problema debe producirse por lo menos dos veces al día durante un mínimo de tres meses consecutivos y en niños mayores de 4 años, edad en la que se considera que ya son capaces de controlar su vejiga.
Entre las causas del problema suele estar el no haber aprendido bien a controlar la micción durante los primeros años de aprendizaje o el dormir profundamente y no despertarse cuando su vejiga se llena. A veces también puede estar relacionado con situaciones de estrés como la separación o divorcio de los padres, el fallecimiento de un familiar, el cambio de residencia, el nacimiento de un hermano, debido a accidentes e intervenciones quirúrgicas, ante abusos sexuales, hospitalizaciones, etc.
Algunas recomendaciones que los padres con niños que presenten este problema deben de tener en cuenta son las siguientes:
- No prive a su hijo de la ingesta de líquidos para evitar la producción de orina. El niño debe beber cuánto le pida el cuerpo y producir una cantidad de orina normal. Sólo así se acostumbrará a ejercitar su capacidad de retenerla.
- No debemos de insistirle para que vaya al baño sin necesitarlo porque de esta manera no cogerá el hábito de acumular cierta cantidad de orina y retenerla, aunque sí es aconsejable que acuda al baño antes de acostarse, y si aún así sigue mojando la cama, se ha de despertarlo una vez, hacia la mitad de la noche, para que orine.
- Es muy adecuado que el niño practique ejercicios que le ayuden a aumentar la capacidad de su vejiga. Cuando el niño tenga ganas de hacer pis, que vaya al cuarto de baño, se siente en la taza y retenga la orina durante 30 segundos. Una vez que haya empezado a orinar, le pediremos que contenga la orina unos segundos, varias veces.
- Debemos de reforzar y alabar cada vez que consiga mantenerse seco durante el día o la noche.
- Si aún así el problema no remite, no dude en consultarnos.