La mayoría de las personas pasamos físicamente en el trabajo muchas horas, pero para algunas la jornada laboral no termina cuando dejan su puesto, sino que continúa en sus pensamientos durante su tiempo libre, absorbiendo la poca energía que queda para dedicar a otros quehaceres.
Si no aprendemos a desconectar y descansar en nuestro tiempo libre, poco a poco nos iremos cargando físicamente y emocionalmente, el estrés se irá acumulando, pudiendo provocarnos agotamiento físico, insomnio, problemas gástricos y/o dermatológicos; además de un agotamiento mental, que reduciría nuestra capacidad para generar nuevas ideas (creatividad), mermaría nuestra motivación y disminuiría nuestra ilusión e interés por esforzarnos en conseguir nuevas metas.
Así, en cualquier tipo de ocupación podemos llegar a sentirnos estresad@s si no tenemos recursos que nos permitan desconectar de nuestro trabajo en el tiempo libre. Por ello, es importante conocer algunas estrategias que te permitirán prevenir y reducir el estrés así como comenzar a disfrutar de tu tiempo libre, éstas son:
- Ubica físicamente el lugar donde las preocupaciones laborales se han de quedar. Imagínate que una vez que sales del trabajo y cierras la puerta, todas las cosas relacionadas con él se quedan atrapadas en ese espacio sin poder salir o tener acceso a la mismas hasta que no vuelvas a abrir esa puerta.
- Aprende a Relajarte poniendo en práctica técnicas de Relajación o Respiración.
- Programa periodos de tiempo diarios para realizar actividades que te gusten. Ten en cuenta que, aunque las vacaciones sirvan para recuperarte del estrés sufrido en el trabajo, sus efectos no van a durar mucho tiempo si no dedicas también algunos momentos durante la semana a desconectar.
- Practica ejercicio físico. Hacer alguna actividad física no solo facilita la distracción sino que también hace que aumente tu nivel de endorfinas, produciendo una sensación de bienestar; así como serotonina y dopamina, neurotransmisores que producen efectos antidepresivos.
- Plantéate nuevos retos y trata de superarlos. Elige actividades que puedas dominar para que te ayuden a aumentar tu sensación de eficacia, confianza, autoestima y competencia; así como a crear nuevas habilidades y destrezas. Éstas te ayudaran a recuperar tus recursos psicológicos agotados por el estrés o a crear otros nuevos.
- Distráete realizando otras actividades. Cualquier actividad que te sirva para distraerte o entretenerte, como realizar tareas domésticas, cuidar de tus hijos, ver la televisión, leer un libro pueden ayudarte a desconectar y recuperarte del estrés de la jornada laboral ya que hacen que te olvides del trabajo y centran tu atención en otras cosas.
- Establece momentos de descanso. Procura establecer horarios para descansar y durante ese tiempo desconecta tu mente del trabajo, pensando en otras cosas agradables.
- Despégate de la tecnología. Procura desconectar tu móvil laboral en las horas libres y evita usar el ordenador si éste lo utilizas como instrumento de trabajo. Recuerda que nadie es indispensable en su puesto laboral y que hay otras cosas igual o más importantes en tu vida que el trabajo.
- Disfruta de la compañía de otras personas. Pasa un rato en familia o con la pareja, queda con amigos, etc. Mantén contacto con personas con las que disfrutas de su compañía.
“No permitas que tu trabajo te absorba todo tu tiempo para disfrutar de tu vida”