Bueno, la verdad es que estamos pasando un largo invierno. Y hemos notado, aquí en Asturias especialmente, que las consultas por depresión aumentan en otoño y en invierno. Pero ¿existe una base científica para esto? Pues si, porque como en todo, el progreso hace que el complejo mecanismo de la mente humana, del cerebro, se vaya desentrañando poco a poco, con las nuevas neuroimágenes, con los estudios de tantos colegas que dejan su vida y su esfuerzo en averiguar los entresijos del alma humana.
Verán. la serotonina es un neurotransmisor muy, muy importante. Los neurotransmisores son para que nos entendamos, algo así como una sustancia que hace que las neuronas se conexionen entre sí. Y si eso falla…uf, mal vamos. Pues eso sucede cuando no hay luz… cuando el sol desaparece de nuestras vidas. Algo que sucede con frecuencia en el norte de nuestro país, y ya ¡que podemos decir del norte de Europa en el que por ejemplo, existe un claro aumento de los suicidios causados por depresión!
Está claro que hay un tipo de depresión puede estar relacionada con el descenso de las horas de luz. Estaciones como el otoño o el invierno, en las que las noches son más largas y los días más cortos, porque se favorecen un estado de ánimo bajo, como consecuencia de una mayor producción de melatonina u hormona del sueño, y si aumenta la melatonina ( por cierto la que nos hace dormir) disminuye la serotonina que es el neurotransmisor de la “ felicidad, del estado de ánimo, de la actividad, euforia, apetito sexual, etc. . A veces en personas predispuestas bastan dos semanas de falta de luz constante para predisponer a este bajo estado de ánimo. Estos días se ve, se nota. La gente parece triste, a veces amargada, somnolienta, irritable, con pérdida de energía y la mayoría de las veces y para más inri, con aumento de apetito, lo que al engordar nos hace sentirnos aún más deprimidos. Para variar se da más en mujeres ( yo no sé pero siempre nos toca), bueno sí lo sé por nuestro sistema hormonal. Pero también tenemos muchas cosas positivas así que seamos eso: Positivos.
Ante la lluvia y el invierno. Cambiar de actividades, dejar que la vida siga y que después de la lluvia no lo olvides siempre sale el sol.
- Quédate en casa y organiza una pequeña fiesta con los amigos
- Ponte a ver esa serie que nunca puedes ver cuando estás fuera de casa
- Lee ese libro que te espera desde hace un montón.
- Juega a la wii con tu familia, puede ser muy divertido.
- Queda para tomar un buen chocolate con churros con esa amiga o amigo que hace tanto que no ves.
- Por favor, descansa lo suficiente, ¿como mínimo 8 horas! La depresión acecha a veces simplemente por falta de sueño
- Come de una forma sana, alimentos antidepresivos: los que contienen triptófano: nueces, patatas, almendras, fréjoles, fiambre de pavo, plátanos, miel, leche, queso y por supuesto las legumbres.
- También todos los ricos en omega 3; pescado azul, salmón, espinacas, repollo, pepino , fresas…y en alimentación, la sorpresa final .Afortunadamente no es una leyenda: ¡El Chocolate! En pequeñas dosis por favor y cuanto más cacao mejor, es también un poderoso antidepresivo.
- Haz ejercicio. Aunque no salgas a correr porque diluvia, practica yoga en casa, es fácil con la Tablet o el ordenador, haz pilates, muévete, aumentarás las endorfinas que son otras simpáticas amigas que suben nuestro estado de ánimo.
Así que como veis en el vídeo, lo importante al final… es despertar cada día, dar gracias, y con lluvia o sin lluvia… vivirlo.
También os recordamos un vídeo del programa de Conexión Asturias en la Tpa, en el que nuestra psicóloga Isabel Menéndez Benavente nos explica qué es y nos ofrece consejos…