Aunque, las primeras impresiones son importantes, no lo son todo y, generalmente, solemos tener más oportunidades para caer bien o gustar a los demás mientras charlamos con ellos, aquí entrarían en juego las conocidas Habilidades sociales.
Las habilidades sociales son un conjunto de técnicas y estrategias con las que podemos relacionarnos con los demás, expresar nuestros deseos y opiniones, dar y recibir cumplidos o hacer peticiones, siempre respetando las conductas de los demás.
Las habilidades sociales son importantes para «triunfar» en la vida. Forman parte de lo que llamamos la Inteligencia emocional, y se basan en la comunicación y en la empatía.
Como ya se ha mencionado en otra entrada de nuestro blog, hay tres tipos de comunicación, la comunicación pasiva, asertiva y agresiva.
Las personas más pasivas, no se atreven a dar su propia opinión, utilizan un tono de voz más bajo, no saben decir no y hacen lo que los demás les ordenan.
Las personas agresivas, son aquellas que utilizan un lengua verbal más agresivo, un tono de voz más alto, incluso pueden llegar a insultar ¡, imponen su opinión e invaden el espacio vital de los demás.
Por último, el estilo asertivo. En este estilo comunicativo se encuentran aquellas personas con las mejores habilidades sociales, es aquel donde pueden expresar sus opiniones e ideas respetando siempre las de los demás, saben decir no sin sentirse culpables, utilizan un tono de voz adecuado, etc.
Las habilidades sociales pueden derivar tanto de la genética como del entorno. Podemos haber heredado unas buenas habilidades para relacionarnos con los demás, pero si este no es el caso…la buena noticia es que las mismas se pueden aprender y trabajar.
Nunca es tarde para empezar a trabajar las habilidades sociales.
¡Si quieres, puedes!
